Alfonso Ochoa GUANAJUATO La cesión por parte del Ayuntamiento de
14 hectáreas de la zona protegida de El Orito a una inmobiliaria se hizo
por la "puerta trasera", acusó el diputado y senador electo Francisco
Arroyo Vieyra. El desconocimiento que hace el alcalde Juan Antonio
Valdés Fonseca de la asociación civil creada para conservar el parque
ecológico es por ignorancia e inexperiencia, dijo el también ex presidente
del organismo ciudadano, "espero que sea por eso y no por mala fe que
pudiera presumir actos dolosos y peor aún manejos oscuros". Al
referirse al hecho, Arroyo Vieyra, quien hace una semana dejó la
presidencia de los Amigos de El Orito donde lo sustituyó el doctor en
Ciencias, Renato Iturriaga, afirmó que Juan Antonio Valdés está creando un
conflicto social en donde no lo hay, que afecta incluso al empresario de
Jarab. Le puedo mostrar una copia del acta notarial de constitución de
la asociación, dijo, pero lo más importante en este asunto es no generar
un problema, cuando se pueden arreglar los malos entendidos simplemente
dialogando, informando e informándose, no haciendo las cosas de manera
apresurada. "Lo que ha faltado en este asunto es comunicación, lo que
quieren los vecinos y lo que quiere la empresa, y no tiene por qué el
presidente municipal hacer una acta por la puerta trasera que engaña y
ofende a los vecinos y que va a crear a una inmobiliaria tan importante de
mi amigo Juan Andrés Rangel de Alba, un conflicto innecesario", afirmó.
Los vecinos de San Javier queremos a Juan Andrés Rangel de Alba,
pensamos que está haciendo una inversión muy fuerte que va a generar
empleos, y eso nos interesa a todos, tener buenos servicios en Guanajuato,
manifestó. Interrogado sobre la declaración de inexistencia de la
asociación que hizo el alcalde interino, Arroyo Vieyra expresó que espera
que el presidente municipal lo haya dicho por ignorancia, por que no tiene
obligación de saber todo, de lo contrario pensaría que está actuando con
mala fe. Aunque eso sí dejó claro que el alcalde tiene la obligación de
atender a una asociación civil legalmente constituida, cuya directiva ha
cambiado y está en vías de protocolizarse, de lo cual basta lo dicho por
vecinos de la zona para que su opinión fuera tomada en cuenta. "En vía
de mientras tomo la declaración del presidente municipal como una enorme
descortesía, pues personalmente lo invité al cambio de la directiva de la
asociación civil Amigos de El Orito, así como al presidente municipal
electo, Eduardo Romero Hicks", apuntó. Recordó que el día del cambio de
directiva el presidente municipal en funciones confirmó su asistencia y
luego hablaron de su oficina a las tres de la tarde para reconfirmar,
aunque desgraciadamente se tuvo la descortesía, la poca caballerosidad de
no haber asistido, y no sólo eso pues le habló por radio y lo apagó. Es
una descortesía a un habitante de la ciudad de Guanajuato, a una persona
que ha ayudado a llevar recursos a la ciudad y es una descortesía a un
senador de la República electo por el estado que merecería un poquito más
de atención de su parte, concluyó el diputado Arroyo Vieyra.
Cuestiona Lo que ha faltado en este asunto es comunicación,
lo que quieren los vecinos y lo que quiere la empresa, y no tiene por qué
el presidente municipal hacer un acta por la puerta trasera que engaña y
ofende a los vecinos y que va a crear a una inmobiliaria tan importante de
mi amigo Juan Andrés Rangel de Alba, un conflicto
innecesario. Francisco Arroyo Vieyra diputado federal
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