Alfonso Ochoa GUANAJUATO Antes de tomar protesta a la nueva
directiva de la Asociación Civil Amigos de El Orito, el alcalde electo
Eduardo Romero Hicks, les dijo a los mismos que lo que estaban haciendo es
un ejercicio de responsabilidad muy importante para Guanajuato; como
presidente de la nueva directiva de la asociación fue elegido por
unanimidad Renato Iturriaga. La reunión de la Asociación se realizó
ayer por la tarde, misma en la que el diputado federal, Francisco Arroyo
Vieyra, informó que por sus actividades en el Distrito Federal le era
imposible seguir al frente de la Asociación, y se comprometió a seguir
apoyándola desde su cargo de senador de la República. El diputado
Arroyo Vieyra, le recordó al alcalde electo Eduardo Romero Hicks que se
contaba con el parque gracias a la generosidad de Josefina Echanove, quién
vendió la propiedad a un precio muy bajo, por lo que se esperaba hacer un
reconocimiento en breve. Señaló que se pedirá que se reconsidere el que
pase por el parque el libramiento nor poniente, pues podría impactar de
una manera muy negativa a la reserva ecológica. Estamos con un ánimo
amigable, no con un ánimo rijoso, creemos que todo se puede hacer con
transparencia y legalidad, buscamos que no se cercene el parque,
afirmó. Del revuelo, lo positivo Por su parte, Renato Iturriaga, el
nuevo presidente de la Asociación, doctor en ciencias e investigador del
Centro de Investigaciones en Matemáticas (Cimat), dijo que de todo este
revuelo hay que sacar lo positivo, que la Asociación Civil funcione en
beneficio de todo Guanajuato, apuntó. Iturriaga dijo que lo primero que
habrá que hacer es una serie de caminatas, a las que invitó a todos los
miembros de la Asociación para que se conozca el estado actual en que se
encuentra el parque. Además señaló que entre sus primeros trabajos por
hacer será buscar una entrevista con el alcalde en funciones, Juan Antonio
Valdés Fonseca, pues dijo que le interesa conocer los proyectos que el
alcalde afirma existen para El Orito. Por su parte, Leopoldo
Sangrador, quien en la nueva directiva es el secretario, dijo que es
importante aclarar el asunto de la supuesta cesión de una parte del parque
a una inmobiliaria. Sangrador dijo que no entendía qué beneficios le
puede traer a la ciudadanía el que se ceda una parte del parque, y que si
acciones como esa se concretan al rato se puede ceder otra parte del
parque. Por su parte, el profesor Juan Manuel Rocha, vocal de la
directiva, habló de algunos de los problemas que son recurrentes en El
Orito, como la inseguridad, pues dijo que hay jóvenes que acostumbran
usar el parque para drogarse. El profesor propuso que se informe a los
vecinos de El Orito de la reconstitución de la Asociación Civil y de las
acciones que se pretendan emprender. Al inicio de la reunión, Gil Bor,
también doctor en ciencias e investigador del Cimat, dio un panorama
general de la situación en que se encuentra el área protegida, lo que fue
complementado con la intervención de Agustín Madrigal, quien realizó en
2001 una propuesta de manejo del parque, la que no se concretó. En la
nueva directiva de la Asociación, además de Renato Iturriaga, que es el
presidente, y del secretario Leopoldo Sangrador, se integaron Lolita
Anaya, Carlos Arias, Luis Antonio Muñoz Mosqueda, Ricardo Navarro, Arturo
García, Juan Manuel Rocha y Gil Bor, como presidente del Consejo de
Vigilancia, y como secretaria del mismo, Erica Arroyo Bello.
Las ausencias A la reunión no se presentó el alcalde Juan
Antonio Valdés Fonseca, ni representantes de la inmobiliaria JARAB, de la
que es dueño Juan Francisco Rangel de Alba. Se recuerda que el tema
del parque ecológico El Orito cobró notoriedad la semana pasada, una vez
que se conoció que en la última sesión de Ayuntamiento de la
administración de Rafael Villagómez, el nueve de octubre de 2003, se
acordó ceder en custodia un predio de más de nueve mil metros a la
inmobiliaria JARAB. El alcalde quien primero declaró públicamente que
no veía ningún problema en que se entregara en custodia el predio en
mención, posteriormente rectificó y dijo que una vez estudiado el caso
entendía que el acuerdo de 2003 no tenía consistencia jurídica y que no
permitiría que se cercara al interior del parque, sin embargo ayer no
asistió a la sesión de la Asociación Civil, encarga de proteger la reserva
ecológica de propiedad municipal. |